jueves, 24 de mayo de 2012

Silbido


Señores, hoy ha pasado algo.
¿No veis que estoy silbando?

Después de observar un rato
la insistente estela en el aire
que deja la carcajada de un niño
he creado un inventario
para construir un paraíso
que cabe dentro de la boca.

Si me lo permiten, allá va:
  1. Reciclar todo aquello que no funciona para que funcione.
  2. Declarar la guerra a los titulares de periódico y crear una realidad alternativa para evidenciar que mienten.
  3. No pasar más de una hora sin abrazar a un amigo, a un amante, a un árbol, a un paisaje, a un niño, a un viento o a una idea inspiradora y alegremente revolucionaria.
  4. Llevar una nariz de payaso como amuleto mágico.
  5. Sonreír 300 veces al día como mínimo.
  6. En caso de no conseguir lo anterior, sobornar a alguien con cosquillas para que nos haga cosquillas.

viernes, 4 de mayo de 2012

"Epílogo"

Cómo será tocarte,
después de los amantes, cuando la ilusión embista nuestros pasos con fugas subterráneas y una luz estroboscópica nos haga creer en la reencarnación de la ternura y recibamos una carta de despido de la Nada sobre la que nos apoltronamos tras el suicidio del último romántico...

Cómo será tocarte,
tras encintar a las nubes con todos los pensamientos que no fueron y reciclar los pistilos de las flores para convertirlos en vacua inspiración y carpe diem, en esos paseos sintigo hacia un wasteland bajo miradas de plaza pública, libros anteriores a 1645 y tic tac tic tac tic tac...

Cómo será tocarte,
después de carambolas de ojos y triquiñuelas del aire con conversación y atletismo sin medalla y entretenimiento en frisos de caras parlantes y una corrida roja sobre un lienzo y un otro convertido en ; orgías de sentir in media res, a cuatro patas para chocarla con el cielo y albadas asesinas sin extremaunción... 

Cómo será tocarte,
después de esta soledad barroca que imagina un porno de holocausto, y cena de hiel con trufas y dunas de spaguethi, noches de refriega con Saturno boquirrubio y nuevo padrón en nowhere vestida con el uniforme protocolario de la diosa Libertad...
 
Cómo será tocarte,
desnudados los mantras de la afonía con resaca y los morros mordidos por un Baco de calle que esperó a mi último cubata para asesinar mi dignidad y un billete de bus que conducía al estómago del Leviatán, que ulceré con tantas lágrimas...

Cómo será tocarte,
con una arruga nueva: fruto de conversar dos horas con un árbol y de tripar con el gris de una escalera y de escribir un poema como éste, tan real que parece de mentira...

Cómo tocarte,
tras ser otra vez el número impar que sonreirá a la Muerte, después del planeta nuevo y la atmósfera delirante, el fuego fatuo, la arqueología interior, la excursión hacia Delfos y la Minotauromaquia (o el arte de torear laberintos con monstruos dentro)...

Cómo tocarte,
si fui las cuarenta vírgenes que desvirgaron a los cuarenta ladrones de la cueva de Ali Babá y la Luna me dijo “eres digna de ser la puta del sol” y me atraganté con un mástil y Ulises, en verdad, se travestizó tras los cantos de sirena...

Cómo tocarte,
si vendrá lo que vendrá,
sin acertijo,
tras el punto final de este epitafio.

Qué es para ti lo más bello del mundo

-Dime, qué es para ti lo más bello del mundo. - me preguntó el duende. Llevaba mucho tiempo metido dentro de mi armario, y sólo cuando dejé de pensar en otras cosas me empezó a hablar.

Después de mucho meditar, le respondí:

- Para mí lo más bello del mundo es la inspiración.
- Te estás saltando pasos.- replicó el duende.- La inspiración es una emanación de la belleza.
- No lo comprendo.-respondí.- La inspiración precede a la creación artística.
- No. La inspiración es oleaje en el mar de la belleza. No es anterior ni posterior. Es como el perfume de una flor. La inspiración se parece al perfume de una flor que sueñas y cuyo aroma persiste al despertar.

Cerré el armario un rato y me quedé tan pensativa que me olvidé de pensar. Cuando volví a abrir el armario, el duende se había puesto uno de mis vestidos estampados. No pude contener la carcajada.

- ¿Por qué te ríes? - me preguntó el duende.
- Porque me ha sorprendido verte vestido así. Es gracioso.
- ¿Y te parece bella la risa?
- Sí, si no es maliciosa.
- ¿Lo es ahora mismo la tuya?
- No, porque te tengo simpatía.

Entonces, el duende se quitó el vestido, y vi su desnudez. Su piel era viscosa, arrugada y llena de verrugas. Tenía un enorme falo erecto y me miró con unos ojos perversos que me dieron miedo. De su boca salió fuego y quemó el vestido.

Grité de terror y cerré la puerta del armario. Él la volvió a abrir, y me puse a correr. Intenté abrir la puerta de mi casa pero el duende la había bloqueado con su magia. Me puse a llorar.

- ¿Por qué lloras?- me preguntó el duende. Su pregunta me serenó.
- Tengo miedo de que me hagas daño.
- ¿Te parece bello ese miedo?
- No.
- ¿Por qué?
- Porque no es deseable.
- ¿La belleza se parece al deseo?
- Déjame meditarlo.


Y aún lo estoy meditando. Por eso pido por favor a los lectores de esta anécdota que piensen tanto en esto que se olviden de pensar. Y que me digan algo al respecto para charlarlo con el duende. He buscado, sin embargo, una foto de algo que me parece bello. Quizá nos ayude a meditar. Gracias por vuestra colaboración.

La yonki del amor


"La yonki del amor es cleptómana de polvos y caricias",  dicen D-Krostings
La mujer del cuadro está enamorada del ideal de amor puro.
"Amar es crear en la belleza", decía Platón en el Banquete.
Entonces, ser yonki del amor implica vomitar belleza en las letrinas del paraíso.

Juego de palabras

Caminas por el mundo como si levitaras.
Caminas por el mundo como si lo evitaras.

Todo es al revés, la historia estaba mal contada

- Señor, me ha salvado un dragón.
- ¿Un dragón?
- Sí, iba a comerme un  caballero, pero el dragón ha venido y me ha rescatado de los brazos pegajosos del caballero.
- ¿No era al revés?
- ¡Qué va! El dragón da besos de fuego y me lleva volando en su lomo.